El presidente de Bolivia, Evo Morales, reveló el domingo que su gobierno financiará con fondos del Tesoro la construcción de un nuevo padrón electoral biométrico, principal condición de la oposición para canalizar en el Congreso las elecciones generales de fin de año, y declinará la compra proyectada de un avión oficial.

"Vamos a garantizar un nuevo padrón moderno. Esto depende de recursos económicos. El año pasado decidimos reservar un dinero en la Ley Financial para la compra de un avión (presidencial). Pero les dije a los ministros que lo gastemos en el nuevo padrón y también para alguna demanda o emergencias de sectores sociales", confió el mandatario en una entrevista dominical a la radio y televisión estatales.

Morales, el presidente más viajero de la historia nacional, se transporta en una modesta aeronave fabricada en los años ’70 del siglo pasado y "eso conlleva un riesgo" latente, representó el vicepresidente Alvaro García Linera.

El dinero reservado para la compra de una aeronave que ha cumplido ya, sobradamente, su techo de horas de vuelo, "no sabemos si será suficiente" para sustanciar la adquisición de la tecnología que requiere montar un nuevo padrón electoral biométrico, manifestó Morales, que se mantiene en huelga de hambre desde el jueves último en demanda de la ley electoral.

La oposición boliviana condicionó la aprobación de la nueva ley electoral a que el padrón electoral vigente sea renovado.

Morales anunció que el gobierno de Canadá estaba dispuesto a aportar 15 millones de dólares para la compra del nuevo registro electoral boliviano.

El gobernante se dijo esperanzado en que países de Latinoamérica y Europa apoyen con recursos el proceso de reempadronamiento que debe ejecutar la Corte Nacional Electoral (CNE).

La CNE debe levantar en tiempo record un nuevo padrón biométrico de poco menos 4 millones de electores en Bolivia y unos 300 mil en el exterior.

De acuerdo con estimaciones preliminares el emprendimiento exigirá entre 6.000 y 10.000 puntos de empadronamiento en Bolivia, y también en Argentina, España, Estados Unidos, Italia y Francia entre 13 países donde se ha radicado en los últimos decenios el grueso de dos millones de migrantes bolivianos.

Morales, que exige la homologación del voto de bolivianos en el extranjero, derecho consagrado, además, en la nueva carta política, esperaba recibir en las próximas horas un reporte técnico de la CNE sobre la factibilidad técnica y financiera de la empresa.

"Técnicamente es posible hacer una gran movilización para modernizar todo el padrón. Cuando nos proponemos algo, lo hacemos seriamente. Hay que esperar lo que dice la Corte", señaló.

El Gobierno tenía planes de invertir unos 57,8 millones de dólares en la compra de aeronaves para labores de rescate, defensa civil, transporte presidencial e interdicción al narcotráfico, entre otros menesteres.

Caracas ha suministrado en comodato desde 2006 helicópteros para el traslado interior del gobernante y labores de asistencia civil en situaciones de desastre natural.

Morales utilizó hasta entonces un helicóptero, tecnología de los años 50, aún en pie, para sus múltiples traslados en Bolivia.

El mandatario contó haber pasado apuros cuando, para sustanciar sus viajes internacionales por avión, debió apelar al favor de de Argentina, Brasil o Venezuela.

Bolivia compró en 1997, en medio de denuncias probadas de sobreprecio, durante la administración del ex dictador y presidente conservador, Hugo Banzer, un avión a turbina reacondicionado que se estrelló dos años más tarde en operaciones de despegue.

El gobernante de izquierdas recordó que el uso de un avión presidencial en Bolivia devino, generalmente, en corruptelas.

"El ex presidente (Gonzalo Sánchez de Lozada, 1993-97 y 2002-203) tenía su propio avión y se autoalquilaba. Nunca pensaron ni en el gobierno, ni en la patria. Si lo hubieran hecho, ya el Estado hubiera tenido un avión para poder viajar", justificó.

Una aeronave oficial "es un instrumento de trabajo" para Morales, recalcó García Linera.

Pero, con el objetivo de salvar la sesión estancada del Congreso, que se reúne para aprobar una Ley Electoral Transitoria y dar paso a una concertación con los congresistas de oposición, Morales se desprendió de aquella necesidad.

El mandatario planteó sus convicciones sobre el mecanismo de la biometría (disciplina que se ocupa de medir características biológicas del ser humano) y lo calificó como "el mejor control que podemos tener".

"Si implementamos rápidamente este padrón, daremos un paso importante en la región que ya lo utiliza", anticipó al tiempo de reprochar las acciones de gobiernos anteriores al suyo de corte neoliberal.

"¿Qué hicieron los anteriores gobiernos?, ¿por qué no llegaron a este padrón electoral biométrico?", cuestionó.




lostiempos.com - Abril 2009